A veces uno fantasea y dice "que hubiera pasado si...".
Bueno, es algo que nunca va a suceder, sin embargo, a mi modesto punto de vista, Mike Tyson tenía todas las de ganar.
Muchos me preguntarán si estoy seguro de lo que digo, les diré que sí. Muhammad Alí, considerado como el mejor boxeador de la toda la historia y quien puso la frase "flota como mariposa, pica como avispa" era muy rápido dentro del cuadrilátero, poco visto hasta el día de hoy en la división de los pesos pesado. Golpeaba y amarraba a su rival ante el posible peligro.
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Quizás eso no hubiera mellado en el accionar del popular 'ironman'. Tyson estaba hecho para una pelea así, se caracterizaba por su velocidad y avasallar a sus rivales desde el primer segundo del round. Sus ganchos eran formidables, tantos o mejores que los rivales a los que enfrentó Alí, tales como Joe Frazier ó George Foreman.
Tyson con su técnica, rapidez y fuerza hubiera derrotado en el primer asalto al gran Muhammad.
Soñar no cuesta nada, al menos esa es mi visión de lo que pudo pasar. De todas maneras les dejo algunos datos de cada de uno de ellos. Saquen ustedes su propias conclusiones.
A lo largo de la historia pugilística, existieron grandes boxeadores que nos deleitaron con su gran poderío.
Podemos recordar sus espectaculares combates, así como sus amargas derrotas.
Citaremos a algunos como Mike Tyson quien se convirtió en el boxeador más joven de conseguir un título mundial con tan solo 21 años.
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El gran Alí, siendo considerado el mejor boxeador de la historia. Un atleta, completo en todos los aspectos. Estuvo suspendido durante 5 largos años por negarse a ir a la guerra de Vietnam. Sin duda un ídolo en todos los aspectos. Falleció el año 2016 víctima de la enfermedad del Parkinson.
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Así podríamos mencionar a muchos más, entre ellos, Roberto 'Mano de Piedra' Durán, Ray Leonard, Joe Frazier, George Foreman, Evander Holyfield, entre otros.
Detallamos algunos datos respecto a estos boxeadores, como victorias alcanzadas, KO, títulos obtenido, entre otros.
Mike Tyson fue catalogado en su momento como uno de los mejores boxeadores de la historia, sin embargo, las malas juntas, el exceso de confianza, las noches, confabularon para que 'el hombre de hierro' tire a la basura todo lo que había construido desde un inicio.
Fue el boxeador más joven en conquistar un título de los pesos pesados.
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Los invito a repasar las principales peleas que tuvo el ex-campeón del mundo, hasta la más recordada que fue ante el desconocido James 'Buster' Douglas.
Sin más que comentarles, les dejo este pequeño homenaje al gran Mike Tyson.
Conversamos con Guillermo Oshiro, docente del Instituto San Ignacio de Loyola quien nos brindó sus apreciaciones respecto a la pelea por el título mundial welter entre Orlando Romero y Ray "Boom Boom" Mancini.
En el siguiente video, el profesor Oshiro nos comenta sobre los momentos vividos de aquella pelea en la que estuvimos a punto de lograr el título del peso ligero.
También recordó que Romero estaba ganando la pelea hasta que llegó ese fatídico noveno asalto en donde nos quitó el sueño.
No les sigo contando más y dejemos que el profesor nos relate aquella noche del 15 de setiembre de 1983.
Los años pasan y pesan dice la 'guardia vieja'. Sin embargo, existen recuerdos que difícilmente puedes sacártelo de la cabeza.
Este es el caso de la pelea que viví -y que ya les había contado en una anterior publicación- entre Orlando Romero, trujillano 'al mango' ante el descendiente de italianos, el norteamericano Ray 'Boom Boom' Mancini disputado en el mes de la primavera, un 15 de setiembre de 1983 en el Madison Square Garden de New York.
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No los quiero aburrir de nuevo contándoles lo que pasé aquella oportunidad y la rabia que aún siento, sino que siempre es bueno escuchar la opinión de otras personas y mejor aún, que de boxeo sepan tanto como yo de basketball.
Una amena y sana conversación con David Thornberry. En un primer momento pensábamos que el tiempo nos iba a quedar largo, pero realmente nos faltó.
La historia del boxeador mexicano es conocida por la gran mayoría de los amantes al boxeo.
Desde sus inicios, en su debut en Sinaloa, hasta una de sus últimas peleas frente al norteamericano Meldrick Taylor.
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Julio César Chávez fue considerado uno de los mejores boxeadores de la historia, no solo de México, sino del mundo, llegando a alcanzar 100 victorias en condición de invicto.
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El ídolo consiguió los siguientes títulos:
Campeón mundial de peso super pluma del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
Campeón mundial de peso ligero de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Campeón mundial de peso ligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
Campeón mundial de peso super ligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
Campeón mundial de peso super ligero de la Federación Internacional de Boxeo (FIB).
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Ahora su hijo le sigue sus pasos, sin embargo, nunca le llegará a los talones al 'emperador de México'.
Aquí les repasamos algunos de sus principales combates por diversos lugares del mundo, comenzando por su ciudad natal, Culiacán.
Julio
César Chávez es considerado por muchos como el mejor boxeador que ha
dado México y uno de los 10 mejores en la historia del boxeo. Casi veinticinco
años de brillante carrera, Chávez
ganó muchos títulos mundiales en tres diferentes categorías de peso como son Superpluma,
Ligero y Superligero.
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Julio César
Chávez fue reconocido por su excepcional pegada, su gancho al hígado,
el incesante acoso a sus oponentes y una mandíbula muy resistente. Considerado
también como uno de los mejores boxeadores libra por libra del mundo en la
década de los 90’, y fue incluido en el prestigioso Salón de la Fama
Internacional de Boxeo en la edición de 2011.
Tengo una pelea muy marcada y
grabada en mi retina. Fue ante Greg
Haugen quien en la antesala de la pelea había comentado que Chávez se había enfrentado a taxista y
que el pueblo mexicano no sabía nada de boxeo. Esto enervó los ánimos del
campeón y salió a ‘matar’ al norteamericano ante un Estadio Azteca con el espectacular marco de 132 mil espectadores.
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El mexicano le hizo tragar sus
palabras y lo derrotó en el sexto asalto. Al final el americano tuvo que
disculparse y decir que esos taxistas debieron ser muy duros.
Otra que también recuerdo fue
ante el también norteamericano Meldrick
Taylor. Nadie se podía imaginar el desenlace ya que Taylor estaba ganando
la pelea y solo un milagro podía revertir el duro combate.
Taylor comenzó
a ‘payasear’ en el último asalto, eso le costó caro, un ‘cruzado’ de derecha
directo al mentó frenó sus aspiraciones de proclamarse campeón. Conteo del
réferi y no había tiempo para más.
A un campeón no se le falta el
respeto ya que el respeto se lo ganó con 25 años de brillante carrera.
Apodado
también como 'el cholo', Roberto 'Mano de Piedra' Durán, nació en
un barrio humilde de Panamá y tuvo que ganarse la vida a costa
de sus manos (o puños).
A
su corta edad (16 años), debutó profesionalmente en el cuadrilátero en la Arena de Colón en la categoría gallo ante el
chiricano Carlos Mendoza, cobrando aproximadamente 25 dólares en ésta su
primera pelea. Para suerte de su oponente, solo le duró cuatro asaltos.
El día 23 de febrero de 1968 quedará marcado como el debut de
un ícono en la historia del boxeo.
superluchas.com
Luego
llegaron más combates, como aquel en donde se coronó por primera vez campeón
mundial en la categoría ligeros un 26 de junio de 1972, en New York, al derrotar por nocaut técnico en el decimotercer
asalto al campeón mundial de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), el escocés Ken Buchanan.
Tuvo dos derrotas muy
marcadas a lo largo de la carrera del ex campeón del mundo. Una de ellas fue
ante el mítico Tommy
Hearns, siendo para los especialistas en la materia, una pelea
totalmente dispareja y en donde Roberto Durán no se encontraba
en su plenitud boxística. Lamentablemente para él, fue noqueado en dos asaltos.
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Y la otra ante Ray Leonard que lo sufrió por abandono casi al concluir el combate,
una pena para el campeón, pero en aquella pelea el norteamericano le estaba
ganando en forma muy categórica. A mi modesto entender, debió seguir hasta que
el cuerpo resista
El 15 de setiembre de 1983 fue la
fecha en que estuvimos cerca de tocar el cielo con los guantes. Lamentablemente la suerte nos fue esquiva.
En New York, el
Madison Square Garden estuvo abarrotado de gente ya que se disputaba el título
del campeonato mundial ligero. En ese momento, el campeón defensor del título
era el descendiente de italianos, Ray Mancini, apodado ‘Boom Boom’ y el retador,
el peruano Orlando Romero‘Romerito’, un fajador de aquellos y que tenía a todo
el Perú a la expectativa de ésta pelea.
Parecía que estábamos en la
Bombonera del viejo Estadio Nacional ya que el aliento hacia el peruano era
incesante. Recordemos que por aquellas épocas la gente emigraba a otros países,
uno por la economía inestable que azotaba nuestro país y otro por el terrorismo
que estaba en su nivel más alto.
En ese momento contaba con 7
años, pero como aficionado al boxeo estaba muy emocionado de ver a Romero
dentro del cuadrilátero disputando un título mundial. Veía a vecinos que
llegaban a la casa con cajas de cerveza, obviamente mis tíos los dejaban
ingresar.
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Cuando entonaron las notas del
Himno Nacional todos nos pusimos de pie, vi muchas lágrimas; en ese momento
entendí el sentimiento hacia la Patria.
Inicio de la contienda, primer
asalto, nada de estudio, los dos fueron al golpe por golpe, no como las peleas
de ahora que deben de transcurrir tres rounds para comenzar a fajarse.
Ambos zurdos, de fuerte pegada,
se conectaban cruzados que impactaban en las mandíbulas, pero tenían buena
asimilación. El trujillano no se amilanaba ante el campeón, iba al frente sin
ningún complejo, llevaba el ritmo de la pelea. Mancini aplicaba jabs, ganchos y
eso hacía más fuerte a Romero que por cada golpe recibido, conectaba dos.
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En casa, la gente grande ya no
sabía qué hacer, todos estaban eufóricos, muchos comentaban que ésta pelea nos
las llevábamos y que después de Mauro Mina no había otro boxeador como Romero.
Hasta donde yo recuerdo, antes de
Romero hablaban mucho de Fernando Rocco y que también era un gran fajador, pero
no pasó de campeonatos sudamericanos.
Volviendo a la pelea,
escuchábamos lo que comentaban Kike Pérez y Eduardo San Román -quienes habían
viajado a transmitir la velada boxística- en donde mencionaban que Romero
estaba por delante en las tarjetas de los jueces y que si seguía a ese ritmo
íbamos a tener por primera vez un campeón mundial.
El trámite seguía siendo el
mismo, transcurría el sexto asalto y sus rostros estaban muy magullados.
Mancini tenía el pómulo derecho totalmente hinchado y Romero la ceja derecha
ensangrentada.
Noveno asalto, quedaba poco para
terminar el fatídico round de la pelea pactada a diez. Cruce de golpes, Mancini
que conecta al peruano con un cruzado de izquierda, éste tambalea, otra vez el
campeón aprovecha un descuido y lo cruza con un zurdazo, el trujillano que cae
a la lona impactando fuertemente la cabeza con el piso del ring.
Conteo hasta diez y Romero no se
levantó más. Toda la euforia que vivíamos se esfumó, hubo lágrimas, pero ésta
vez de tristeza.
Así es el box, como la vida
misma, a veces puedes estar arriba, pero si te descuidas puedes terminar en el
fondo.
Después de esa pelea ya no seguí
la carrera de Romero, creo que tampoco llegó a disputar peleas a nivel
internacional.
Siempre se le recordará por todo
lo que nos hizo vibrar aquella noche.
El 22 de
enero de 1988, en el Atlantic City de Nueva Yersey, se disputó una de las peleas
más esperadas de aquella época. Larry Holmes con 38 años de edad frente al que en ese entonces era considerado
como uno de los mejores boxeadores, Mike Tyson, con tan solo 21 años.
Existen muchos boxeadores que se resisten a aceptar
el paso del tiempo, unos se suben al ring por necesidad, otros por el mal
manejo de sus entrenadores y que solo miran sus intereses.
Esto sucedió con el gran Larry Holmes, campeón de los pesos pesados por más de 7 años y que
intentaba recuperar su título frente a un Mike
Tyson en todo su apogeo.
Ocho años atrás, Larry Holmes vencía a un MuhammadAli, catalogado como el mejor boxeador de todos los tiempos y al que se le
atribuye como responsable de su retiro.
Por suerte, youtube es tan complaciente con todos,
al menos conmigo, que me dio la oportunidad de ver ese combate. Si bien es
cierto, Larry Holmes era mucho más
joven y con una mayor rapidez que Ali,
eso no significaba que sea sometido a burla, efectuando movimientos pélvicos en
donde denotaba mucha sobriedad ante su oponente.
Daba tristeza ver el final de una era, una era
llena de triunfos, que en cierta forma no debió terminar de esa forma por lo
que significaba Ali para el boxeo
mundial.
Un joven Mike
Tyson se comunicó con Ali y le dijo: “no
te preocupes campeón, algún día ganaré por ti”. El día de la pelea, Muhammad Ali ya retirado y con la enfermedad del Parkinson que lo
aquejaba, subió al ring y le dijo al oído a Tyson: “recuerda lo que me prometiste, ve y consigue
la victoria por mí”.
boxeotuesquina.com
Este combate, para suerte de Holmes, duró solo cuatro asaltos.Desde el primer round recuerdo que vi a un Tyson enfurecido,
queriendo llevar a la lona a su contrincante lo más pronto posible.
Aplicando cruzados y ganchos de derecha que
llegaban al cuerpo y a la cabeza de Holmes,
quien intentaba escaparse moviéndose por todo el cuadrilátero, pero era
rápidamente alcanzado por el campeón quien lo conectaba nuevamente. Lo único
que atinaba Holmes era a amarrar cuántas veces podía. Se daba cuenta que no iba
a poder y que el tiempo era su mejor aliado.
El segundo round, era más de lo mismo, Tyson golpeando arriba y abajo, Holmes
soportando el vendaval de ganchos y cruzados. No había tregua por parte de ‘Iron
man’ (así se le decía a Mike).
Ya en el tercer asalto, Tyson, con el instinto asesino que lo caracterizaba, fue en busca de
él para dar por terminada la pelea, sin embargo, Holmes lo conectó con dos derechazos que impactaron en su rostro. Eso
le daba más ánimo a Larry, quien
saltaba por el ring, pero para mala suerte de él recibía un golpe seco en el
mentón que lo frenó.
El cuarto y definitivo asalto, Holmes fue enviado tres veces a la lona, producto de rectos y
cruzados de derecha y en donde ya no pudo recuperarse.
Larry Holmes continuó su carrera por dos años más, pero ya no supe mucho de él, sin embargo, Tyson siguió derrotando a cuanto rival se le cruzaba, hasta que se topó con un desconocido James 'Buster' Douglas, pero esa otra historia.
Mike Tyson cumplió su promesa hecha años atrás. Fue una de las cuentas que quedaron saldadas para el gran Ali, quien finalmente fue vengado.
Dos campeones con historias distintas, uno en la quiebra y el otro ya fallecido. Así es el mundo del boxeo.
Allá por los
años 80’, el combate entre los estadounidenses Tommy Hearns y Marvin Hagler fue
catalogada como la pelea del siglo. Ambos llegaban con un récord impresionante,
lamentablemente para el espectador el sueño solo duró tres asaltos.
El Caesar Palace de Las Vegas fue el lugar en donde se
celebró uno de los enfrentamientos más intensos que pude ver. Recuerdo la fecha
con exactitud, 15 de abril de 1985, contaba con 9 años y uno a esa edad ya se
da cuenta de lo que sucede a su alrededor.
Tommy Hearns
y Marvin Hagler eran los que estaban
sobre el cuadrilátero y toda mi
familia -incluyéndome- estábamos al pendiente de esa pelea. Solo recordaba a uno de ellos, un moreno alto y fuerte que
apabullaba años atrás y en menos de dos asaltos a un panameño al que le decían ‘Mano
de piedra’. Ese era el gran Hearns.
En mi casa había mucha euforia, las cervezas y las
apuestas iban y venían, sin embargo, los entendidos de éste deporte, que en
éste caso eran mis tíos, comentaban que la pelea la ganaba Tommy Hearns con facilidad.
El clásico saludo antes del inicio ante el árbitro
y ya estaban listos para ‘fajarse’. Los rostros de ambos no se me quitan aún de la
cabeza, en ese momento me dije: 'se van a matar'.
Toque de campana y a diferencia de otras peleas, en donde el primer asalto siempre es de estudio, el
que tomó la iniciativa ésta vez fue Hagler,
que con un cruzado de izquierda logró conectar en el rostro de su oponente.
Al parecer eso ‘molestó’ a Tommy y desde ese
momento no dejaron de intercambiar golpes. Se sabía que Hearns aniquilaba a sus
contrincantes en los primeros rounds, pero se llevó una ingrata sorpresa.
Mi familia estaba descontrolada ya que veían a Hagler responder con más fuerza a cada
golpe de Hearns. No querían que
termine ese primer e intenso asalto. Fue lo mejor que pude ver y creo que hasta
ahora no se ha repetido un round tan sangriento como ese.
El segundo round fue más de lo mismo, pero con un MarvinHagler dueño del ring y con un Hearns
sin encontrar el golpe certero que le dé la victoria. Cada vez que llegaban a
las cuerdas se sabía que Hagler
sacaría mayor provecho por tener brazos cortos, eso le facilitaba conectar con
facilidad en toda la humanidad de su rival.
Al comienzo del tercer round ya se notaba a Hearns
muy agotado, se movía sobre el cuadrilátero pero denotaba una sonrisa muy
nerviosa. Hagler percibió eso y se fue al ataque. Un golpe certero en la sien fue el comienzo del fin para Tommy, luego vino un cruzado de derecha a la mandíbula de Hearns y a la lona. Conteo respectivo pero no había respuesta.
Ganador por K.O el 'maravilloso' Marvin Hagler.
Han pasado muchos años y aún sigo viendo las repeticiones de esa gran pelea por youtube.
